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Grupos de civiles y voluntarios de Ajdabiya están tomando posiciones en la entrada sur de la ciudad para preparar su defensa tras la incursión, la pasada noche, de las fuerzas de Muamar Gadafi en Briqa, 70 kilómetros al sur de Ajdabiya. Los revolucionarios están armados con tanques del Ejército y unidades antiaéreas, y cuentan con otras armas diversas, como fusiles de cazadores.
Munir Abubkr, de 25 años, está con los revolucionarios: “Quieren venir aquí y matarnos. Esta es nuestra última posición de defensa, pero no tenemos miedo. Vamos a pedir a Alá que nos ayude para defendernos”.
La milicia del régimen, un número no determinado de fuerzas pro-Gadafi, irrumpió por la noche en la localidad petrolífera de Briqa y aterrorizó a la población local. Los vecinos de Ajdabiya aseguran que se trata de mercenarios venidos desde Níger.
Bloqueo de aeropuertos
Los revolucionarios están inutilizando los aeropuertos de la zona para evitar que aterricen aviones con mercenarios e intenten retomar centros neurálgicos de la zona liberada de Libia.
En Bengasi, cientos de jóvenes libios se han presentado como voluntarios en los centros de reclutamiento, tal como informa EFE. La ciudad está bajo control de los rebeldes desde el 21 de febrero, para enfrentarse a las fuerzas de Gadafi, que intentan reconquistar las ciudades de Briqa y Ajdabiya, en el este del país.
Dos batallones de fuerzas leales al líder libio, con apoyo de mercenarios, han lanzado este miércoles un ataque contra la ciudad petrolera de Briqa y han tomado parte de la ciudad y el aeropuerto, según ha informado la cadena Al Yazira. Al menos dos personas han muerto en los enfrentamientos, según algunos testigos. Asimismo, las tropas del régimen han atacado, la pasada noche, la ciudad de Ajdabiya, también en el este del país, hasta ahora en manos de los rebeldes, según han informado Al Yazira y Al Arabiya.
En Bengasi, como en Ajdabibya, se preparan para hacer frente a esta ofensiva. "Vengo para hacer la yihad", ha asegurado Mohamed al Burqui, de 19 años mientras entraba en el centro de reclutamiento de voluntarios 17 de Febrero (día del comienzo oficial del levantamiento contra el régimen de Gadafi), situado en Bengasi, la segunda ciudad del país. Dentro del cuartel, un centenar de jóvenes esperaban impacientes las órdenes de los militares, mientras llegan informaciones sobre combates entre milicianos y fuerzas fieles a Gadafi en la ciudad petrolera de Briqa.
"Morir como mártires"
"Estamos preparados para morir como mártires", ha asegurado Walid bin Amer, un ingeniero informático de 28 años ataviado con vestimenta militar, que ha agregado que aún no sabe cuándo van a partir hacia el combate, ya que todo depende de los dirigentes militares. "Libia libre, Muamar fuera", corean los reclutas levantando las manos, animados por sus mandos.
Bin Amer ha explicado que este es el tercer día que viene aquí para recibir entrenamiento militar, pero que todavía no le han dado armas. "Lucharemos con las manos", le interrumpe un compañero también vestido con atuendo militar, entre una mayoría de jóvenes vestidos de civil.
Confusión sobre los combates
La ciudad de Briqa vive desde el martes intensos combates. Las fuerzas de Gadafi intentan recuperar el control de esta localidad petrolera. Un oficial ha señalado que los rebeldes han logrado frenar el ataque, aunque el hecho que el acceso a la ciudad sea imposible desde ayer dificulta saber a ciencia cierta cómo se desarrollan los combates. Así mientras algunas fuentes aseguran que el Ejército controla parte de la ciudad, los rebeldes insisten en que que han repelido el ataque.
Artillería pesada
Las tropas han entrado en Briqa con carros de combate y artillería pesada y han tomado el control de un barrio residencial. En la zona del puerto se están produciendo intensos combates."La pasada noche, el Ejército se ha enfrentado a los rebeldes en el aeropuerto", ha declarado un médico que atiende a los heridos en los combates que se libran en Ajdabiya.Los heridos de la batalla de Briqa están siendo trasladados al hospital Mohamed Mginif en medio de un enorme caos. Las ambulancias llegan al centro sanitario en intervalos muy cortos y los enfermeros reciben a los heridos al grito de "Dios es el más grande!.
Los opositores al régimen sostienen, por su parte, que han logrado frenar la ofensiva de Gadafi. "Briqa está totalmente bajo el control de la revolución. Muchos ciudadanos han salido ya hacia Ajdabiya para ayudar", ha explicado bajo anonimato un general de policía de Ajdabiya, que ha añadido que rebeldes han salido también de Bengasi con el mismo propósito.
"Las fuerzas de Gadafi han llegado a Briqa y ya se están retirando", ha declarado Mehdi Souleimane Hussein, un de los combatientes de Ajdabiya, que ha apuntado que solo resisten los mercenarios.
Esta ofensiva de las fuerzas leales a Gadafi se produce apenas 24 horas después de que el hijo del mandatario libio Seif El Islam negara en declaraciones al canal británico Sky News que el régimen tuviera intenciones de montar una contraofensiva hacia el oeste del país.
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